¿Te sientes inseguro cuando caminas o haces ciertas actividades?… ¿notas que te falla el equilibrio y no reacciones rápido en superficies inestables?… Introdúcete en las bases de y el tratamiento del equilibrio con este post
Contenido
Tratamiento del equilibrio
¿Qué es el equilibrio?
El equilibrio se define como la capacidad que tiene un individuo para mantener una posición determinada en el espacio-tiempo, independientemente del movimiento que se realice. De esta forma, se describen dos tipos de equilibrio (1):
- Estático: habilidad de mantener nuestro cuerpo erguido y estable sin que exista movimiento. Por ejemplo, cuando estamos de pie esperando en una fila o cuando estamos sentados en una silla o un sillón viendo la tele (1).
- Dinámico: habilidad para mantener el cuerpo erguido y estable en acciones que incluyan el desplazamiento o movimiento de un sujeto. Por ejemplo, para poder caminar en línea recta o poder esquivar obstáculos sin caernos o poder subir y bajar escaleras, correr, etc (1).
Asimismo, es importante tener en cuenta que el equilibrio requiere de la interacción de tres sistemas para poder funcionar al 100%:
- Sistema vestibular: registra la posición y el movimiento de la cabeza, ayudando así a coordinar los movimientos de la cabeza y los ojos. Esto proporciona a su vez un equilibrio al ajustar la postura del cuerpo. Nosotros no podemos controlar la función de dicho sistema, sin embargo, cuando se encuentra alterado nos genera sensaciones muy desagradables afectando a nuestra funcionalidad (2,3).
También debemos destacar que se compone de 2 tipos de estructuras: los órganos otolíticos y los conductos semicirculares. Los primeros detectan la fuerza de la gravedad y las inclinaciones de la cabeza, así como la aceleración lineal. Los segundos se caracterizan por ser sensibles a la rotación de la cabeza, es decir, a los giros (2,3).
- Sistema visual: capta la información sobre el entorno que rodea al individuo. Primero la retina se encarga de recoger la primera información para poder transmitir una señal a través de los nervios ópticos pasando por el quiasma óptico. A continuación, se produce una sinapsis en el núcleo geniculado lateral para que la señal llegue finalmente, hasta la corteza visual primaria/secundaria donde la información es procesada. Es aquí, donde se emite una respuesta en base a la información que se ha recibido (3,4).
El sistema visual tiene gran importancia en el equilibrio puesto que presenta estructuras encargadas de procesos necesarios para el mismo. Algunas de ellas proporcionan información sobre movimientos reflejos de orientación sobre objetos de interés, otras controlan los movimientos direccionales rápidos de los ojos, y otras el proceso general del comportamiento del sistema visual (3,4).
- Sistema somatosensorial: se trata del componente más importante dentro del equilibrio porque nos da información sobre la posición del cuerpo en relación con el espacio. Los receptores que componen este sistema reciben y envían información sobre todas las modificaciones que se producen sobre la geometría corporal. Existen dos tipos de sensibilidad somatosensorial (3,4):
- Superficial o exteroceptiva: compuesta por receptores de la piel.
- Profunda o propioceptiva: compuesta por husos neuromusculares, órganos tendinosos de Golgi y receptores articulares corporales.
- Asimismo, existe una sensibilidad a nivel visceral, denominada esplacnostesia.
Patologías frecuentes
Nistagmos vestibulares
Es una patología caracterizada por la repetición de movimientos espasmódicos e involuntarios de los ojos. La causa principal es la fatiga o lesiones nerviosas. Los nistagmos pueden estar provocados artificialmente por una modificación de la temperatura de la endolinfa, la cual es un líquido que reside en los conductos semicirculares del sistema vestibular (5).
Se conocen dos tipos de nistagmos (5):
- Nistagmo vestibular periférico: asociado a una lesión en la parte vestibular del oído interno o del nervio vestibular producido por una asimetría de los canales semicirculares que se interpreta como un movimiento de rotación de la cabeza por el sistema nervioso central.
- Nistagmo vestibular central: relacionado con lesiones en los núcleos vestibulares situados en el tronco del encéfalo o en las vías vestibulares centrales.
Síndrome vestibular uni/bilateral
El síndrome vestibular unilateral es una insuficiencia aguda de uno de los laberintos vestibulares. Puede estar causada por propagación de una enfermedad (virus) del oído medio o una trombosis de la arteria laberíntica. Habitualmente, en los pacientes esto genera una torsión de 10 grados de ambos globos oculares hacia el lado de la lesión provocando una inclinación de cabeza hacia el mismo lado. Esta compensación a nivel de la cabeza tiene lugar con el fin de hacer coincidir la mirada con el horizonte inclinado. Como consecuencia, nos encontramos a menudo caídas de los pacientes hacia el lado de la lesión puesto que las vías vestibuloespinales no son capaces de compensar la inclinación (6,8).
Por su parte, el síndrome vestibular bilateral es definido como una afectación en ambos lados, de manera que el paciente sólo tiene la vista para mantener el equilibrio. Por ello, cualquier distracción que desvíe la mirada del paciente puede hacer que se caiga (7,8).
Tratamiento del equilibrio
Los tratamientos dependerán de qué sistema o sistemas que conforman el equilibrio se encuentren afectados. De esta manera, podremos encontrarnos pacientes que presenten sólo un sistema afectado, pacientes que tengan afectación de dos sistemas o en los que haya una afectación de los tres sistemas que intervienen en el equilibrio. Por tanto, debemos tener claro quién es el responsable de explorar y ofrecer un tratamiento específico para cada uno de los sistemas que pueden verse alterados (8,9).
- El sistema visual deberá ser evaluado por un oftalmólogo encargado de determinar si la fuente de síntomas es la vista o no para poder orientar el tratamiento adecuado.
- El sistema vestibular deberá ser evaluado a nivel de otorrinolaringología, los cuales establecerán el tratamiento específico para dicho sistema.
- El sistema somatosensorial podrá ser evaluado por el fisioterapeuta con pruebas específicas que pongan en jaque la posición del cuerpo en relación con el espacio.
No obstante, aunque la fuente de síntomas se encuentre exclusivamente en uno de los sistemas, es muy recomendable el trabajo de la fisioterapia de forma complementaria para poder aumentar la capacidad de trabajo de los otros dos sistemas y poder suplicar así, el déficit del sistema afectado (8,9).
Marta Díaz Sáez (Fisioterapeuta)
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Referencias bibliográficas
- Pollock, A.S.; Durward, B.R.; Rowe, P.J.; Paul, J.P. What is balance?. Clinical Rehabilitation. 2000;14(4): 402–406.
- Sakka, L.; Vitte, E. (2004). Anatomie et physiologie du système vestibulaire. Morphologie. 2004; 88(282): 117-126.
- Peterka RJ. Sensorimotor integration in human postural control. J Neurophysiol. 2002;88(3):1097–118.
- Nashner L, Berthoz A. Visual contribution to rapid motor responses during postural control. Brain Res. 1978;150(2):403–7.
- Gottlob I. Nystagmus. Curr Opin Ophthalmol. 2001 Oct;12(5):378-83.
- McDonnell MN, Hillier SL: Vestibular rehabilitation for unilateral peripheral vestibular dysfunction. Cochrane Data- base Syst Rev. 2015;1.
- Brandt T: Bilateral vestibulopathy revis- ited. Eur J Med Res. 1996;1:361–368.
- Hall CD, Herdman SJ, Whitney SL, Cass SP, Clendaniel RA, Fife TD, Furman JM, Getchius TS, Goebel JA, Shepard NT, Woodhouse SN: Vestibular rehabilitation for peripheral vestibular hypofunction: an evidence-based clinical practice guideline: from the American physical therapy association neurology section. J Neurol Phys Ther. 2016;40:124–155.
- Herdman SJ, Blatt P, Schubert MC, Tusa RJ: Falls in patients with vestibular deficits. Am J Otol. 2000;21:847–851.